El estudio es una tarea importante que requiere de organización
y planificación, así como de un lugar adecuado para que su desarrollo sea
satisfactorio.
Los factores ambientales son todos los elementos externos que inciden, para bien o para mal, en la calidad de tus estudios. Entre estos factores se encuentra la organización para el estudio, es decir, la disposición ordenada de los elementos que componen el acto de estudiar: lugar, mente y tiempo.
Tu inteligencia y tu esfuerzo personales te ayudarán mucho en tu trabajo de estudiante. Pero no creas que sólo con ellos pueden alcanzar el éxito; hay otros aspectos fundamentales que debes tener en cuenta:
Los aspectos ambientales:
1.- Procurar que tu ambiente familiar sea agradable
2.- Tener un lugar tranquilo para estudiar
3.- Disponer de silla y mesa cómodas.
4.- Trabajar con buena luz, natural o artificial.
5.- Evitar los ruidos: el silencio te ayudará a concentrarte
Los aspectos personales:
1.- Estudiar cada día a la misma hora.
2.- Buscar para ello el momento en que te sientas más descansado.
3.- Dormir lo suficiente todas las noches.
4.- No hacer grandes esfuerzos antes del estudio.
5.- Alejar de tu mente las preocupaciones y los disgustos.
6.- Si además de todo esto pones buena voluntad y entusiasmo, verás como tu estudio será más
eficaz y pronto cosecharás sus frutos.
ORGANIZAR EL LUGAR
En lo posible trata de estudiar con luz natural y con buena ventilación, ya que la renovación del aire favorece la oxigenación del cerebro y aumenta la atención.
Tu escritorio debe contener todo lo que vas a necesitar. Esto evitará que deba perder tiempo buscando lápices o libros.
Por último, tu silla debe ser cómoda, y permitirte apoyar los pies en el suelo y la espalda en el respaldo. Al apoyar el antebrazo en la mesa favorecerás una muy buena postura.